La importancia de caminar acompañada

Llevo muchos años constatando los beneficios y no solo la necesidad de caminar acompañada en la vida.

Considero que los humanos como seres sociales necesitamos vivir en comunidad. Solos no podemos con todo. Nos necesitamos y complementamos los unos a los otros desde los orígenes de la humanidad, cuando unos cazaban y otros cuidaban de los más pequeños o vigilaban el fuego.

Pero más que por pura supervivencia, necesitamos (es una necesidad recogida en la famosa Pirámide de Maslow) relacionarnos, sentir afecto,  formar parte de un grupo, y no solo por puro interés. También sentimos la necesidad de dar, de compartir nuestras opiniones y afecto, de que nos consuelen, de que nos ayuden y de ayudar a los que nos necesitan (o creemos que nos necesitan).

¿Qué beneficios obtenemos de caminar acompañado?

• Refuerza nuestra autoestima. El sentimiento de pertenencia a un grupo de personas que piensa como yo, o con el que me puedo reconocer afín o complementario, me hace sentir que no estoy equivocado o no soy un “bicho raro”.
• Aleja la soledad. No tendré la misma afinidad con todos los integrantes del grupo, pero seguro que con uno o más de uno, podré hablar o salir a tomar algo si quiero o  si lo necesito.
• Facilita nuestro autoconocimiento, porque es a través de los demás como mejor nos conocemos a nosotros mismos. Si nos queremos ver por fuera, buscamos un espejo. Si nos queremos ver por dentro, vemos nuestro reflejo en los demás aunque no siempre seamos capaces de entenderlo.
• Descubrimos que somos complementarios, que no todos sabemos hacer las mismas cosas, que nos necesitamos los unos a los otros, que compararse con los demás es absurdo e innecesario, y que no sirve de nada, porque cada uno de nosotros somos como las piezas de un puzle, necesarias todas ellas para que se complete.
• Mejorará tu comunicación para ser escuchado, además de que aquello que os une, se hace cada vez más visible, más importante y os recuerda que la unión hace la fuerza.
• Nos sentimos protegidos. Nuestras opiniones pueden pasar desapercibidas o no, pero será el grupo el que normalmente cargue con las consecuencias de ellas, por lo menos, en un primer momento. Además de que seguro que habrá personas que piensen como nosotros. Tampoco es lo mismo viajar solo a una ciudad desconocida que hacerlo con alguien. La protección por acompañamiento físico es real en muchos sentidos.
• Conocemos otras formas de vida, otras costumbres, otras recetas culinarias, otros libros recomendados, otras maneras de hacer las cosas, que, sin duda, enriquecen o pueden enriquecer nuestra vida, si queremos que así sea. No todos sabemos de todo ni las mismas cosas, así que es una fuente continua de aprendizaje, y por lo tanto de desarrollo.
• Practicas tus habilidades para la resolución de conflictos que, sin duda, aparecerán y te permitirán conocer diferentes razonamientos y puntos de vista. Flexibilidad, tolerancia y respeto serán puestos en práctica más de una vez.
• Relaja la presión social que frente a algunos aspectos se pueda sentir. No es lo mismo que te señalen con el dedo a ti solo por hacer o no hacer algo a que señalen a todo un grupo en el que puedes pasar desapercibido.
• Nos sentimos informados porque al estar unidos por algo en común, dificultará que perdamos información importante. Por ejemplo si perteneces a un grupo de fans de algún cantante o escritor te enterarás de sus conciertos o novedades.
• Nos lo pasamos muchísimo  mejor. Es más divertido y más sencillo caminar acompañado y sortear los imprevistos de la vida en compañía.

Así que, conociendo estos beneficios y seguro que algunos más que no he recogido, ¿qué mejor que ser consciente de quiénes son tus compañeros de camino?

Me recuerda al dicho ese de “dime con quién andas y te diré quién eres” ¿Lo habías escuchado?

Piensa que caminas junto a tu familia desde que naces, pero conforme creces escoges a tus amigos, esa familia que uno elige con el corazón.

Y también conforme creces caminas acompañada de los miembros de los diferentes grupos en los que participas según tus aficiones, las actividades que realizas por un tiempo concreto… y formas parte de los socios del gimnasio, del club de pádel, del AMPA del cole… o de un grupo de Divinas Lectoras donde se comparten opiniones, reseñas e incluso entrevistas con escritores de novelas románticas.

Os comparto la entrevista que mantuve con ellas, con las creadoras del maravilloso grupo de Divinas Lectoras, en este enlace: https://youtu.be/-H9wcvd5POo, y espero que os guste. ¡Gracias, chicas por darme la oportunidad de caminar a vuestro lado!

Y recordando mi adolescencia y juventud y lo mucho que me acompañaban Johanna Lindsey o Jude Deveraux, entre otras, me ofrezco a acompañarte. Si me das la oportunidad de caminar a tu lado, búscame en las redes sociales o a través de mis libros. Te recuerdo que Una pasión escondida es GRATIS.